El estadio del Getafe ha sido castigado con una prohibición de tres partidos después de los insultos racistas dirigidos a Marcos Acuña y Quique Flores
La Comisión de Árbitros de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha impuesto una prohibición parcial en la grada central del Coliseum Alfonso Pérez durante tres partidos.
Además de una multa de 27 mil euros, el Getafe también tendrá que cerrar la grada central en los próximos tres partidos en casa y colocar un cartel visible que condene los actos y conductas racistas, xenófobas e intolerables en el fútbol, según indica la RFEF en un comunicado.
El partido, recordemos, fue interrumpido en el minuto 68 cuando Acuña fue llamado "mono", siendo esta la razón del castigo, ya que consta en el informe del árbitro del partido. Quique Flores también fue objeto de insultos, siendo llamado "gitano", pero esto no aparece en esta condena.
Al final del partido, el capitán del Sevilla, Sergio Ramos, habló abiertamente sobre la situación, dejando claro que no puede haber espacio para estas situaciones en el fútbol: "Tenemos que acabar con este tipo de personas, señalarlas, dejar que la gente las vea y prohibirles la entrada a los estadios y limpiar la imagen del fútbol. El fútbol existe para unir, no para separar".